Con su ayuda, Vanessa consiguió hacer más llevadero un asunto de derecho de familia delicado y díficil. Se encargó de traducir la documentación y de hacer interpretación consecutiva durante las reuniones, ayudándome a comprender temas legales complejos, así como las prácticas y el procedimiento propio del lugar. Contribuyó de forma indispensable con la burocracia, superando a menudo mis expectativas: no solo traduciendo fielmente, sino hablando en mi nombre. Como profesional, Vanessa es una excelente traductora, amable y resulta muy fácil trabajar con ella.